El Día de los Muertos es una celebración católica en memoria de los familiares muertos. La fiesta tiene lugar los días 1 y 2 de noviembre. En México, a pesar de lo macabro del tema, se celebra con gran alegría y júbilo. Se puede decir que es el equivalente a la fiesta de Halloween o Día de todos los Santos. La celebración consiste en, por un lado, limpiar y decorar las tumbas, y por el otro, poner ofrendas. Las ofrendas contienen coronas de flor de muerto, velas, agua y sal, calaveras de azúcar además de los alimentos preferidos por el difunto en cuestión. Dichas ofrendas también se disponen en las casas, pero aquí también pueden poner los platos de comida cocinada y bebida preferida por el muerto. La mayoría de la gente cree que los espíritus de sus ancestros llegan ese día a la casa y se comen y beben el espíritu de los alimentos. En algunas partes de México la fiesta tiene un colorido especial, como por ejemplo, en Mixquic, Pátzcuaro y Janitzio, donde la gente pasa toda la noche junto a la tumba de sus familiares.
Aquí podéis ver unas fotos de la ofrenda que Maria Elena Sánchez, profesora de la Universidad Autónoma de México, puso en la ciudad de Alingsås.
2 comentarios:
Las fotografías tiene muchisimos de colores vivos. Es muy bien!
!Creo que los mexicanos tienen una actitud muy relajada por la muerte! Uno tiene que poder bromear de las cosas importante que la muerte. Quiero visitar Mexico alguna vez durante el Día de Muertos. !Hasta luego!
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