Se puede visitar una parte del edificio en la que se encuentran retablos, pinturas murales, tapices y otras obras de arte.
Es sin duda sorprendente que a solo unos metros del bullicio y la zona comercial vivan unas monjas de clausura. Me pregunto si oirán el ruido de la gente o si alguna se asomará a la ventana con rejas para ver si el mundo ha cambiado. Si lo han hecho seguro que me han visto pasar, porque mi tienda preferida de discos usados está justo delante.
Yo, por si acaso, miro siempre a las rejas de las ventanas.
1 comentario:
Es muy interesante lo que escribes, especialmente con tus propias experiencias!
Saludos,
Svetlana
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